DEMENCIA Y ALZHEIMER
Caminaré junto a ti para que puedas aceptar y afrontar el proceso de deterioro cognitivo de tu familiar desde la serenidad. Estaré a tu lado para que puedas dar pausa a este ciclón emocional, encuentres motivos para seguir adelante, sin olvidar que para cuidar, primero te debes cuidar tu misma.
¿CÓMO QUIERO QUE ME RECUERDEN?
El diagnóstico de una enfermedad neurodegenerativa genera un impacto abrumador tanto para la propia persona como en su familia.
Para la persona es muy duro tener que vivir su presente sabiendo que su futuro va a ser muy incierto, ya que va a dejar de recordar. En este momento es muy importante hacerle saber a la persona que no está sola.
A pesar de que progresivamente va a ir perdiendo la memoria puede ser importante preguntarle qué necesita o qué le puede ayudar para afrontarlo de la mejor manera posible.
Quizás una manera de empezar a transitar este proceso es identificar si tiene algo importante que hacer o vivir antes de perder la memoria. En estos momentos puede cobrar un valor especial el hablar con algún familiar o amigo, viajar o disfrutar de momentos en familia.
Porque al final darse la oportunidad de escoger cómo quiere vivir su día a día puede ser una manera de transmitir a su entorno lo que quiere que se recuerde de ella.
Todo esto puede que le permita afrontar el proceso de deterioro desde otra perspectiva. Sintiendo más paz y serenidad en su proceso de aceptación y adaptación.
Para la familia o los cuidadores principales, en el momento de detectar un deterioro cognitivo puede aparecer una sensación de incertidumbre muy fuerte. Debido a que hay una falta de información del progreso en la persona afectada.
ESPACIO DE CUIDADO PARA TI
Tener herramientas comunicativas para saber qué y cómo preguntar al personal sanitario tendrá mucha importancia en este punto. Para poder entender cómo va a ser la progresión del deterioro cognitivo y cómo le va a afectar a nivel físico y emocional. Mi objetivo es acompañarte en este proceso, así como, a asimilar emocionalmente toda esta información que muchas veces puede desbordarte.
Para la familia una de sus preocupaciones principales es que la persona con Alzheimer o demencia tenga la máxima calidad de vida posible.
Comprender todo este proceso permitirá a la familia poder planificar, organizarse y detectar en qué momentos puede necesitar ayuda externa. De esta manera se podrá identificar previamente qué tipo de ayudas existen para poder valorar su uso cuando haga falta.
Esta planificación te permitirá tener una mayor sensación de control de la situación y poder evitar los estados de angustia o “sentirte sobrepasada”.
No hay que olvidar que cuidar a una persona querida es un acto de amor, pero muchas veces uno se acaba centrando tanto en el otro… que se acaba olvidando de uno mismo. Y se ha de tener presente que para poder cuidar, primero se debe cuidar uno mismo.
Te acompaño a tomar consciencia de ello y a generar un espacio de cuidado para ti, dónde desconectes y, a su vez, puedas reconectar contigo misma.
Y recuerda…puede que tu familiar no te acabe recordando, pero tú siempre vas a recordar quién ha sido y es para ti. Y eso es un regalo de la vida.
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